La Nueve: soldados republicanos españoles en la IIª Guerra Mundial.
La Nueve fue el nombre de la primera compañía aliada que entró en París cuando aún estaba bajo la ocupación nazi. Dicha compañía estaba formada, en su mayor parte, por soldados republicanos españoles que se habían exiliado tras su derrota en la Guerra Civil española.
El 24 de agosto de 1944 dicha compañía, que formaba parte de la 2ª División Blindada comandada por el general Leclerc, entró en París para liberar la ciudad de la ocupación alemana. Estos soldados fueron tomando diversos puntos clave de la ciudad para preparar la entrada del resto de fuerzas aliadas. Además, detuvieron al comandante alemán de la plaza, Dietrich von Choltitz. Sus vehículos llevaban los nombres de diversas ciudades españolas: Brunete, Santander, Madrid, Teruel, Guernica, etc.
La coyuntura histórica.
A mediados de 1944 parecía que la guerra comenzaba a tomar un giro favorable a los aliados en todos los frentes. Desde 1943, las tropas alemanas retrocedían en el frente del este, tras sufrir graves derrotas en Kursk y en Stalingrado. A principios de junio de 1944 se había producido el desembarco de Normandía y los alemanes comenzaron a retroceder también en el frente occidental.
La población parisina, animada por estas circunstancias, se rebeló contra los ocupantes nazis de la ciudad. Ante esta situación, y aunque no era uno de sus objetivos principales, las tropas aliadas decidieron entrar en la capital francesa. La operación se dejó en manos del general Leclerc al frente de su división blindada; en ella estaban alistados unos 3.500 soldados republicanos españoles. La vanguardia de su avance estuvo protagonizada por la novena compañía, la Nueve, dirigida por el capitán francés Raymond Dronne pero conformada por soldados españoles en su gran mayoría. En su avance, una sección montada sobre vehículos semiorugas estadounidenses, con nombres de lugares relevantes en la Guerra Civil española: Guernica, Guadalajara, Teruel, Brunete, etc., y dirigida por el teniente castellonense Amado Granell, ocupó diversos puntos estratégicos de la ciudad y consiguió llegar al Ayuntamiento en la noche del 24 de junio. Simbólicamente habían liberado París. Al día siguiente, entró el grueso de las fuerzas aliadas y los alemanes se rindieron. París había sido liberado de la ocupación nazi.
Su participación en la IIª Guerra Mundial no se limitó a este hecho, sino que también participó en el avance aliado hacia el norte de Francia y Alemania, incluso intervino en la toma del famoso Nido del Águila. No obstante, su composición había variado pues, en las batallas de Vacqueville y Badonviller, la compañía padeció numerosas bajas que fueron reemplazadas por reclutas franceses. Adoptó, así, un carácter franco-español, aunque siempre mantuvo su afán de lucha por la libertad.
La trayectoria de estos combatientes.
La Guerra Civil española provocó, desde sus inicios, un flujo de refugiados que buscaban su salvación en Francia. La ocupación de Barcelona por las tropas franquistas a finales de enero de 1939 produjo una enorme avalancha de refugiados —se calcula que unas 470.000 personas— que desbordó totalmente a las autoridades francesas, dirigidas por un gobierno conservador que, además, veía a los refugiados con temor y no era favorable a su acogimiento. Por ello trató la cuestión como un problema de seguridad, adoptando numerosas medidas policiales y creando un sistema de campos de internamiento (o de concentración) —véase al respecto la entrada https://miradahistorica.net/2019/02/04/los-refugiados-republicanos-espanoles-en-el-sur-de-francia/—
Entre los refugiados se encontraban numerosos militares republicanos que podían aportar tanto trabajo como experiencia militar. Para ellos se abrieron tres posibilidades:
- Alistarse en la Legión Extranjera.
- Alistarse en los Regimientos de Marcha de Voluntarios Extranjeros (RMVE).
- Incorporarse a las Compañías de Trabajadores Extranjeros (CTE).
Muchos soldados republicanos españoles acabaron aceptando alguna de estas opciones, bien por obligación bien porque veían así la posibilidad de continuar la lucha contra el fascismo internacional. No obstante, el Ejército francés siempre se negó a crear unidades exclusivamente españolas.
De esta manera, una parte de los componentes españoles de la Nueve provenía de la Legión Extranjera que permanecía en el norte de África tras el armisticio francés con los nazis. Otra parte procedía de los que había sido obligados a incorporarse a los Grupos de Trabajadores Extranjeros (GTE) al servicio del gobierno colaboracionista francés. Y otra parte relevante procedía de los denominados Cuerpos Francos de África (CFA), creados con el objetivo de incorporar a hombres en edad militar y dispuestos a combatir a Alemania, pero que no deseaban ingresar en las estructuras del ejército francés situado en África. Estas fuerzas crecieron con rapidez y participaron en la campaña de Túnez, integrados en la 9ª División de Infantería de Estados Unidos.
Acabada la campaña de Túnez, los CFA fueron disueltos (1943) y muchos de los voluntarios españoles se alistaron individualmente en las Fuerzas de la Francia Libre (FFL) lideradas por De Gaulle. El periplo de estos soldados republicanos españoles les condujo a acabar incorporados en la 2ª División Blindada francesa dirigida por el general Leclerc. En su seno se formó un batallón, comandado por el capitán francés Joseph Putz, que había sido brigadista internacional en la Guerra Civil de España, en el que abundaban los combatientes españoles, especialmente en la Novena compañía (la Nueve), creada en agosto de 1943.
Durante los meses restantes de 1943, los componentes de este batallón se instruyeron en Argelia y Marruecos. Desde aquí la unidad fue transportada a Gran Bretaña y equipada con material norteamericano —camiones, vehículos semioruga, tanques, etc.—. Iniciado el desembarco de Normandía, toda la 2ª División, y con ella la Nueve, fue desembarcada en Francia, participando en el avance aliado sobre las regiones de Normandía y Bretaña.
La trayectoria de la Nueve se prolongó hasta mayo de 1945 y en ella sirvieron 360 hombres de diversas nacionalidades, de los cuales la mitad fueron españoles. La composición de la compañía tenía cierto parecido con las de las Brigadas Internacionales que habían combatido en la Guerra Civil española: franceses huidos de la Francia de Vichy, refugiados del norte de África, alemanes antinazis, antifascistas belgas, portugueses, italianos, rumanos, etc.
Reconocimiento y memoria histórica.
Hasta fechas relativamente recientes, los franceses, imbuidos en un halo de patriotismo poco generoso, habían ignorado la actuación de los republicanos españoles en el conflicto bélico. Aunque no se puede olvidar el hecho aislado de que ya el 26 de agosto de 1944, en la celebración de la victoria de la liberación de París, el puesto de honor del desfile conmemorativo lo ocupaban los transportes semioruga de la división de Leclerc y, en el primer vehículo, iban Amado Granell y Rafael Gómez. En España, prácticamente, permanecieron borrados de la memoria colectiva dominante.
A finales del siglo pasado este olvido comienza a subsanarse. Así, el presidente francés François Mitterrand y el presidente de gobierno español, Felipe González, realizaron en 1994 un homenaje a la resistencia española que contribuyó a liberar Francia, aunque no se mencionó a la Nueve.
En España, finalizando el franquismo, comenzaron a publicarse algunos estudios sobre la participación española en la Segunda Guerra Mundial, apoyados en testimonios de los participantes y en el contexto del creciente interés por el exilio español. Ya entrado el siglo actual, la publicación en 2008 de la fundamental obra de Evelyn Mesquida —La Nueve, los españoles que liberaron París— contribuyó a la aparición de una nueva valoración del papel desempeñado por estos hombres. A partir de 2015, fueron surgiendo homenajes y reconocimientos a su actuación en la guerra. En 2019, en el marco del 75 aniversario de la liberación de París, se rindieron diversos homenajes a la Nueve. Quizás el hecho de que la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, sea nieta de exiliados españoles haya tenido algo que ver en este cambio.
Su hazaña estuvo animaba por un profundo sentimiento antifascista, afianzado durante la Guerra Civil española, y el deseo de que la derrota de los nazis y de los fascistas italianos se culminaría con la invasión de España y la caída de Franco.
Bibliografía
Ayuso, Silvia (2019) Los españoles que liberaron París. EL PAÍS 24/10/2024. Recuperado de: https://elpais.com/internacional/2019/08/23/actualidad/1566580228_347155.html
Gobierno de Aragón (s. f.) Los de la Nueve. Sus hombres, su historia. Recuperado de https://losdelanueve.es/
La Nueve (24/08/2024). Wikipedia, La enciclopedia libre. Fecha de consulta: 23/10/2024. https://es.wikipedia.org/wiki/La_Nueve
Mesquida, Evelyn (2008) La Nueve, los españoles que liberaron París. Barcelona: Ediciones B.
Radio France. Libération de Paris (2019): la Nueve et ses républicains espagnols enfin pleinement reconnus. Recuperado de: https://www.radiofrance.fr/franceculture/liberation-de-paris-la-nueve-et-ses-republicains-espagnols-enfin-pleinement-reconnus-9924544
Roca, P. (et. al.) (2023). La Nueve. Republicanos españoles en la Segunda Guerra Mundial. Madrid: Desperta Ferro Ediciones.